Estos fondos, obtenidos del reintegro de exenciones fiscales que tuvieron diversas empresas durante los años 80 y 90, han supuesto para el ente foral una recaudación extraordinaria de cerca de 80 millones de euros. Cumpliendo su obligación de distribuir este dinero, considerado “ingreso sujeto a reparto”, la Diputación ya ha previsto transferir 54,5 millones de euros al Gobierno Vasco a través de su Presupuesto, pero no ha hecho lo mismo con el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, al que corresponderían 10 millones de euros.

“El alcalde no puede quedarse de brazos cruzados cuando su propio partido le está negando a Vitoria-Gasteiz unos fondos que por ley le corresponden. No es de recibo asistir a la presentación de unos presupuestos municipales cargados de recortes a la calidad de vida cuando, paralelamente, el equipo de gobierno está renunciando a unos ingresos económicos fundamentales para equilibrar la situación financiera del Consistorio”, ha afirmado el portavoz jeltzale en el área municipal de Hacienda, Borja Belandia.