El Partido Nacionalista Vasco en el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz ha reclamado al equipo de gobierno del PP que aumente el personal y mejore la distribución de zonas del Programa de Educación de Calle dirigido a menores de edad. Actualmente, este servicio cuenta con un total de 16 educadores repartidos por parejas en ocho zonas. Esta cifra no ha variado en los últimos cinco años pese a que el número de menores atendidos ha crecido un 13,5% (de 606 en 2009 a 688 en 2014) y las zonas de intervención han aumentado con los nuevos barrios de Ibaiondo, Salburua y Zabalgana. A esta situación se suma el irregular reparto de zonas de intervención, por el que una sola pareja educativa tiene que hacerse cargo de todo el sur de la ciudad, desde Mariturri a Errekaleor, donde viven cerca de 45.000 personas.

“Una pareja de educadores de calle trabaja directamente sobre los lugares que frecuentan las y los menores, desde el centro cívico hasta el colegio o zonas de ocio como las pistas de skate, utilizando como punto de referencia el servicio social de base. En muchos casos, esta labor también afecta al plano familiar y comunitario. Por ello, asignar a una sola pareja educativa todos los barrios del sur de la ciudad partiendo de un servicio social de base que se ha trasladado de Ariznabarra a Txagorritxu es un completo sinsentido. Hay que corregir esta situación y dotar de más recursos a un programa que está logrando grandes avances en una etapa crucial de las vidas de muchos y muchas menores”, ha señalado la portavoz nacionalista en Políticas Sociales, Nerea Melgosa.

La incorporación de los nuevos barrios a las áreas de intervención del Programa de Educación de Calle ha trastocado especialmente la labor de los y las educadoras a la hora de atender las necesidades crecientes de estas zonas. “Se llega a Zabalgana a costa de recortar los recorridos en otros barrios de la ciudad y algo parecido sucede en Salburua. En un barrio consolidado como el Pilar se ha optado por asignar un solo educador a una zona de casi 40.000 habitantes donde están incrementándose las problemáticas asociadas a menores. Hay que analizar a fondo una nueva distribución que evite un reparto tan descompensado como el actual”, añade Melgosa.

A esto se suma la congelación de fondos para este programa que el PP contempla en el proyecto presupuestario para 2015, al mantenerse la partida en 881.600 euros cuando se va a proceder a sacar a concurso una nueva contrata para la gestión de este servicio. “Ha crecido el municipio, han aumentado las zonas de intervención, ha subido el ratio de menores atendidos y lo único que no mejora es el presupuesto de un programa fundamental para la integración social de muchas niñas, niños y adolescentes. La educación de calle es la mejor receta para evitar en un futuro soluciones mucho más costosas. Hay que aumentar el esfuerzo económico en este campo”, ha concluido la concejala nacionalista.